Una voz le decía: No son como rosas los sueños que tú sigues. Mas Amanda ilusionada continuaba soñando; mientras bailaba camino al pueblo inventaba formas de gastar su tesoro, maneras de regocijarse con tan suculento botín.
Golosinas, Chocolates, un caballo de madera, zapatos negros, capuchas de colores.
Amanda corría eufórica por la tienda de golosinas ignorando esa voz que en su mente le dictaba que hacer, a la par que llenaba su boca con golosinas de muchos sabores, de repente su abuela entró a la tienda, al verle descalza y atragantada con dulces le preguntó con voz severa cómo había conseguido dinero. Alegre Amanda le contó que mientras corría por el bosque se encontró en el suelo una bolsa llena de monedas de oro.
-¡Cómo! –Acentuó con ira la abuela-
-Sí, no tenían dueño y me las quedé…
-¡Eres una bestia! –Gritó interrumpiendo la abuela- no ves que el dinero encontrado es dinero del diablo, al gastártelo lo llamas y al comértelo lo invitas a poseerte-
-Pero abue, yo no quería… –dijo entre llantos la pequeña-
-Claro qué no niña insolente, has traído la maldición a éste hogar, por tu culpa el diablo vivirá entre nosotros, eres torpe, eres idiota, eres la carga más grande en los tiempos más débiles.
-Abuelita…
-¡Calla niña maldita!
Un golpe seco en el rostro de la pequeña Amanda hizo que ésta se callera golpeándose contra el vidrio de la vitrina y así cortarse el cuello, permitiendo que la niña se desangrase hasta la muerte. Cumpliendo de ésta forma la profecía de un diablo que consumiría su alma, la de un avaro demonio quien de ahora en adelante habitaría en su hogar.
Yo creo que fue la Abuela la que llamó al diablo.
ResponderEliminarO el diablo en persona.
ResponderEliminar"Los sueños, cantos son" y como sueños también incluyen pesadillas, quien soñaba? la niña ? la abuela? 0 ¿el diablo???????
ResponderEliminarJGSC
Pues...a mi http://metal15gear27.edublogs.org/files/2011/05/14-me-gusta-22vmrft.png
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