jueves, 14 de abril de 2011

Amaneceres Rojos.

Pocos recuerdan aquella lejana tarde de Abril cuando las cebras cansadas de ser presas de numerosos leones se levantaron en revolución. Todo empezó cuando Ralph –el León más viejo- decidió hacer un banquete en honor a sus catorce esposas. Durante la primera semana de ese mes las cebras fueron cazadas sin misericordia, su sangre tiñó de rojo el hambriento y árido terreno.

Ya en Marzo, las cebras sobrevivientes decidieron que aquello de “comer sin descanso” debería terminar, sobre el terreno en el cual fueron despresadas sus hermanas hicieron un juramento de lealtad y compañía. Así, cada vez que una cebra era cazada las otras corrían a auxiliarle.  Feroces batallas se realizaron en aquella estepa, a tal punto que la sangre regada y secada por el sol, ascendió entre las nubes como un recuerdo perpetuo de aquellos héroes que se enfrentaron a tiranos Leones en tiempos de antaño.

Por eso  la mañana es roja en África, para nunca olvidar a los mártires…

Lukas Löwen

4 comentarios:

  1. Ayer mismo deseaba escribir algo por el estilo, es una encantadora casualidad.

    ResponderEliminar
  2. Las casualidades siempre pueden albergar la magia del actuar inconscientes.

    ResponderEliminar
  3. ¡Bravo!

    No es nunca simple, de inventar una historiá, si tu obtenes sólo 4 palabres. Está muy dotado, ¡realmente!

    ResponderEliminar
  4. A veces es más sencillo de lo que uno cree.

    ResponderEliminar