-Señorita tome asiento por favor.
-¿Pasa algo malo Doctor?
-Me temo que ¡usted se está quedando sorda por oír tanto Rock&Roll!
-Pero, ¿Cómo puede ser eso posible? ¿Está seguro de eso Doctor?
-Me temo que sí, la verdad nos demoramos demasiado en detectar el problema, por suerte el Doctor McSing acababa de llegar de Europa y hacer una maestría en problemas aditivos, él fue quien logó comprender su malestar sin contar las extrañas causas del mismo, para serle franco señorita, a mí se me hace imposible eso, bueno, improbable; asumo que los Decibeles que usted acostumbra a recibir en ciertas canciones o las frecuencias propias de ese género han tenido algo que ver, pero en sí no domino ese ámbito, le daré una cita con el Doctor McSing para que te explique bien que tratamiento seguir.
-Muy buena tarde Doctor yo soy…
-Sí, la paciente del curioso caso de Sordera Irlandesa.
-¿Sordera Irlandesa?
-Sí claro, ¿nunca te has preguntado por qué no escuchas bien, o te duele tanto el oído, mas todo esto no te detiene para pasar horas escuchando viejos LPs?
-Pero, ¿Cómo lo sabe?
-Simple, muy simple… Usted tiene alojado en su oído un Duende Greñudo o Droug Goblin, por esta razón disfrutas tanto del Rock&Roll.
-Eso no tiene sentido.
-No te afanes, es un mal clásico, se expandió con la llegada de la música Europea a América en los años sesenta. Sin embargo, no han pasado más de 8 meses en determinar tan curioso hecho; ahora bien, sanar este mal es muy simple, en primera instancia debes evitar todo esa música estrepitosa, luego encerrarte en un cuarto oscuro y poner a bajo volumen baladas o música para planchar y cada dos días ir aumentando el volumen, luego de dos semanas empiezas a colocar softrock, de esta manera en un mes estarás curada y el Duende rumbo a otro oído.
Consternada por tan curioso hecho y resentida por el malestar decidió seguir las indicaciones del Doctor McSing, sin embargo, luego de la primera canción Balada el duende le habló proponiéndole un trato. Juntos decidieron soñar con cielos de mermelada, escaleras que llegan al cielo, autobuses azules, submarinos amarillos, perros negros, guitarras púrpuras y demás, ah lo olvidaba, ella decidió hospedarlo en su cabello y así, sin dolor disfrutar del Rock&Roll.
-¿Pasa algo malo Doctor?
-Me temo que ¡usted se está quedando sorda por oír tanto Rock&Roll!
-Pero, ¿Cómo puede ser eso posible? ¿Está seguro de eso Doctor?
-Me temo que sí, la verdad nos demoramos demasiado en detectar el problema, por suerte el Doctor McSing acababa de llegar de Europa y hacer una maestría en problemas aditivos, él fue quien logó comprender su malestar sin contar las extrañas causas del mismo, para serle franco señorita, a mí se me hace imposible eso, bueno, improbable; asumo que los Decibeles que usted acostumbra a recibir en ciertas canciones o las frecuencias propias de ese género han tenido algo que ver, pero en sí no domino ese ámbito, le daré una cita con el Doctor McSing para que te explique bien que tratamiento seguir.
-Muy buena tarde Doctor yo soy…
-Sí, la paciente del curioso caso de Sordera Irlandesa.
-¿Sordera Irlandesa?
-Sí claro, ¿nunca te has preguntado por qué no escuchas bien, o te duele tanto el oído, mas todo esto no te detiene para pasar horas escuchando viejos LPs?
-Pero, ¿Cómo lo sabe?
-Simple, muy simple… Usted tiene alojado en su oído un Duende Greñudo o Droug Goblin, por esta razón disfrutas tanto del Rock&Roll.
-Eso no tiene sentido.
-No te afanes, es un mal clásico, se expandió con la llegada de la música Europea a América en los años sesenta. Sin embargo, no han pasado más de 8 meses en determinar tan curioso hecho; ahora bien, sanar este mal es muy simple, en primera instancia debes evitar todo esa música estrepitosa, luego encerrarte en un cuarto oscuro y poner a bajo volumen baladas o música para planchar y cada dos días ir aumentando el volumen, luego de dos semanas empiezas a colocar softrock, de esta manera en un mes estarás curada y el Duende rumbo a otro oído.
Consternada por tan curioso hecho y resentida por el malestar decidió seguir las indicaciones del Doctor McSing, sin embargo, luego de la primera canción Balada el duende le habló proponiéndole un trato. Juntos decidieron soñar con cielos de mermelada, escaleras que llegan al cielo, autobuses azules, submarinos amarillos, perros negros, guitarras púrpuras y demás, ah lo olvidaba, ella decidió hospedarlo en su cabello y así, sin dolor disfrutar del Rock&Roll.
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